En silencio se diluyen dos cuerpos,
y en café, unos minutos de inercia.
En la nada comulgan a veces dos sonrisas.
Y tocamos convencidos nuestro espacio hipotético,
un estudio de la plena coincidencia;
-y en silencio-
frecuencias dormidas no quisieron despertar.
1 comentario:
Sr. Sattori! Vato, Salva, Chacho! PUBLICA POR FAVOR!!!
te kiero!
Publicar un comentario